ALBURA Y DURAMEN: TRACCIÓN Y COMPRESIÓN.

 

Desde que el señor Fred Bear, tuvo la ocurrencia de usar resinas sintéticas en la confección de laminados para hacer arcos tradicionales , todo lo relativo a la construcción de arcos tradicionales , dio un vuelco  de enorme alcance.


 
Antes del uso de fibras y pegamentos sintéticos, los maestros fabricantes de arcos, buscaban en  maderas que permitían fabricar arcos de una pieza. Buscaban que las maderas contaran con dos tipos de compuestos en su estructura interior.


La parte delantera de un arco clásico genera un efecto tracción en la curvatura de las palas. Cuando tensamos un arco y la pala se comba la parte frontal de la pala genera una fuerte tracción contraría a la fuerza que se ejerce en la apertura del arco.


La zona posterior, la que vería el arquero  al abrir el arco, se comprime al curvar la pala. Tiene un efecto de aplastamiento, que ejerce una fuerza de resistencia a la fuerza de apertura que el arquero realiza al abrir el arco. Es una fuerza de compresión de esa parte de la pala.


 
La tracción de la parte frontal, unida a la compresión de la parte trasera, son las dos componentes que ejercen la fuerza y la elasticidad en el disparo. Al realizar el disparo se suman ambas fuerzas de tracción y compresión, y al transmitirse desde ambas palas  a la flecha, generan su impulso.


Las maderas de árboles que tienen estos componentes de diferente densidad en la madera, solían ser las Acacias, los Enebros y especialmente el Tejo.



Caza con arco y arquería tradicional Arcodos


Al ver un arco de construcción clásica, es decir los de un bloque de madera de una sola pieza, solemos ver que hay dos tonos de color en las maderas. El más oscuro se le llama duramen y el más claro se le llama albura.


El más oscuro, el duramen  se coloca en la parte trasera de la pala y es la parte de la pala que ejerce compresión en la apertura.


La parte más clara, la albura, es la parte que se ve en el frontal de arco. Al abrir los arcos esta parte de la madera es la que ejerce tracción.


Caza con arco y arquería tradicional Arcodos

 
Las posición en las que ambos tipos de madera están en el tronco del árbol, no son nunca regulares. El árbol es un ser vivo y crece con irregularidades.


Por lo anterior estos arcos nunca, o en escasas ocasiones, tienen formas regulares o simétricas.  De hecho, los maestros arqueros saben muy bien que cortar las secciones de los troncos de árbol para obtener una pieza base, no debe hacerse con una sierra.  Los despieces de los tablones de madera se van abriendo a base de cuñas. Las cuñas no efectúan cortes  rectos ni simétricos, y terminan por ofrecer unas formas no siempre parecidas a lo que sería un arco.


Caza con arco y arquería tradicional Arcodos

 
Durante la fabricación de este tipo de arcos, la madera va curando y respirando, y cambiando sus curvas. El listón de madera que tenemos medio preparado, se va adaptando y tendremos que volver a trabajar en él muchas veces antes de que parezca a un arco.


 
Algunas veces, no es nada raro, que en medio de la pala encontraremos un nudo de la propia madera, o incluso un orificio en el que había previamente un nudo.


La magia de estos arcos, es realmente impresionante.


Que nadie espere encontrar un arco de este tipo de suave apertura, de dulce suelta, de un alto rendimiento, no se trata de esto. Pero son arcos que enamoran,,, y enamoran mucho.


Ahhh ¡¡¡ preparen la cartera.


Alejandro Martin "TioJander"